Muy buenas
Durante un par de meses me las he arreglado para tener el congelador de mi nevera apagado y así reducir algo el consumo de electricidad ya que no tenía necesidad de congelar nada.
De vuelta al verano, con helados, etc…lo he vuelto a conectar.
Mi sorpresa ha sido que, comparando consumos, tomando referencias en horas en que no hay nadie en casa, incluso periodos de vacaciones con stand bys etc… desenchufado, veo que el consumo apenas varía. Diría que de media el congelador (puesto suavecito) consumiría unos 0,01-0,02 kWh frente a unos estimados 0,07-0,08 kWh de la nevera en modo refrigeración.
Por lo tanto, en ese plan, no creo que me compense andar desconectándolo…
Lo que quería saber son los motivos de la diferencia tan escasa de consumo (recordemos que referencias tomadas en periodos en que la nevera no se abre) ya que uno intuitivamente piensa que, aunque su espacio sea, pongamos, 1/3 o 2/5 del de la nevera, al trabajar a mucha menor temperatura debería llevarse el grueso del consumo.
Entiendo además que, en neveras como la mía, si puedo apagar el congelador es porque son dos compresores y dos circuitos independientes, sin sinergias o modulación de ningún tipo.
Lo único que se me ocurre es que el frío del congelador, por proximidad, se transmita al habitáculo de la nevera y haga que el compresor de la nevera no tenga que trabajar tanto que cuando el congelador está a temperatura ambiente, que quizás el aislamiento entre nevera y congelador no sea tan bueno como en las caras del aparato que dan al exterior y por ahí se fugue mucho frío si el congelador esté apagado, no sé si me explico.
Si alguien puede arrojar más luz, así aprendemos :emoji_slight_smile:
Durante un par de meses me las he arreglado para tener el congelador de mi nevera apagado y así reducir algo el consumo de electricidad ya que no tenía necesidad de congelar nada.
De vuelta al verano, con helados, etc…lo he vuelto a conectar.
Mi sorpresa ha sido que, comparando consumos, tomando referencias en horas en que no hay nadie en casa, incluso periodos de vacaciones con stand bys etc… desenchufado, veo que el consumo apenas varía. Diría que de media el congelador (puesto suavecito) consumiría unos 0,01-0,02 kWh frente a unos estimados 0,07-0,08 kWh de la nevera en modo refrigeración.
Por lo tanto, en ese plan, no creo que me compense andar desconectándolo…
Lo que quería saber son los motivos de la diferencia tan escasa de consumo (recordemos que referencias tomadas en periodos en que la nevera no se abre) ya que uno intuitivamente piensa que, aunque su espacio sea, pongamos, 1/3 o 2/5 del de la nevera, al trabajar a mucha menor temperatura debería llevarse el grueso del consumo.
Entiendo además que, en neveras como la mía, si puedo apagar el congelador es porque son dos compresores y dos circuitos independientes, sin sinergias o modulación de ningún tipo.
Lo único que se me ocurre es que el frío del congelador, por proximidad, se transmita al habitáculo de la nevera y haga que el compresor de la nevera no tenga que trabajar tanto que cuando el congelador está a temperatura ambiente, que quizás el aislamiento entre nevera y congelador no sea tan bueno como en las caras del aparato que dan al exterior y por ahí se fugue mucho frío si el congelador esté apagado, no sé si me explico.
Si alguien puede arrojar más luz, así aprendemos :emoji_slight_smile: