Omadón
SuperNergizo
Hoy he visto un artículo en El Economista sobre el aumento en la sociedad española del número de matrimonios trabajadores sin hijos (el acrónimo DINK en inglés). Los motivos, evidentemente pueden ser muchos, desde la imposibilidad biológica, hasta la libre elección de ese modelo de familia.
Lo que me ha sorprendido en los comentarios de los lectores del periódico, es que, en general, hay una percepción de la gente de que es un modelo "egoísta" que aporta poco a la sociedad, y que debería "penalizarse" tributariamente de alguna manera, para compensar su nula contribución a sufragar el futuro de las pensiones.
Siendo cierto que ese tipo de familias no aportan un nivel de reposición de trabajadores al sistema público de pensiones, ¿no creéis que el balance neto de ese grupo es más positivo que negativo respecto a los ingresos y gastos de los servicios públicos? Evidentemente serán el día de mañana pensionistas que disfrutarán una media de 15 o 20 años de pensión, sin ofrecer una tasa de reposición de cotizaciones a través de la que pudieran hacer sus hijos, pero también creo que se debe tener en cuenta, todo el gasto que implica la natalidad para el estado, en educación, sanidad y asuntos sociales, durante los primeros 20 o 25 años, de cada uno de esos niños.
Lo que me ha sorprendido en los comentarios de los lectores del periódico, es que, en general, hay una percepción de la gente de que es un modelo "egoísta" que aporta poco a la sociedad, y que debería "penalizarse" tributariamente de alguna manera, para compensar su nula contribución a sufragar el futuro de las pensiones.
Siendo cierto que ese tipo de familias no aportan un nivel de reposición de trabajadores al sistema público de pensiones, ¿no creéis que el balance neto de ese grupo es más positivo que negativo respecto a los ingresos y gastos de los servicios públicos? Evidentemente serán el día de mañana pensionistas que disfrutarán una media de 15 o 20 años de pensión, sin ofrecer una tasa de reposición de cotizaciones a través de la que pudieran hacer sus hijos, pero también creo que se debe tener en cuenta, todo el gasto que implica la natalidad para el estado, en educación, sanidad y asuntos sociales, durante los primeros 20 o 25 años, de cada uno de esos niños.