Lo que nos han explicado los de la promotora es que hay que encenderlo una vez al principio del invierno y apagarlo otra vez al final. Además, debemos subir y bajar la temperatura de manera gradual, es decir, no poner el termostato directamente a 22 grados, por poner un ejemplo, sino comenzar por 19 grados allá por octubre un par de días y, cuando coja calor, subirlo a 20 otro par de días... Y que así se ahorra un montón respecto a los radiadores de toda la vida por aquello de la inercia térmica que comentas tú.
No sé.
Ahora todos los pisos los hacen con suelo radiante: será verdad que se ahorra tanto, o será una moda y dentro de diez años volveremos a los radiadores o a los conductos. También parecen las habitaciones más grandes sin los radiadores aunque sean de 8 metros cuadrados...
Gracias por tu respuesta
Se ahorra si se asocia a aerotermia. Con gas natural respecto a radiadores algo se ahorra, pero no mucho (pon un 10%)
Lo principal es el confort que proporciona y la estética de quitar los radiadores de tu vista.