Los sistemas de aire acondicionado y calefacción por conductos funcionan muy bien… cuando están bien diseñados. El problema es que en vivienda, demasiadas veces, el diseño se hace “para que pase el conducto”, no para que la casa sea confortable. Y luego llegan los clásicos: ruido, estancias que no calientan bien, otras que se pasan, consumo alto y la sensación de que “esto no va fino”. En este artículo te dejo una guía práctica para distinguir un buen diseño de conductos de una chapuza antes de que sea tarde.






